Tradicionalmente la familia como estructura e institución nuclear de la sociedad, funcionaba bajo un esquema de relaciones internas y externas que eran producto de una herencia cultural y religiosa cuyos orígenes pueden hallarse en civilizaciones hoy desaparecidas como la romana y religiones como la católica ortodoxa e incluso las culturas mediterráneas de otrora, que determinaba funciones rígidas a cada miembro de la familia desde una perspectiva de género y de edad, y esa brecha generacional se ve hoy.
Pues, bajo el esquema católico/romano el hombre llevaba el dinero a la casa y la mujer se encargaba de las tareas domésticas. No obstante con el devenir del tiempo y debido tanto al cambio generacional y los nuevos estilos de vidas que aparecieron con la llegada de nuevos regímenes políticos y formas de consumo cultural inéditas por parte de la sociedad de masas, otros referentes son los que gobiernan en la familia como estructura social.
A decir de la literatura especializada y los expertos en el tema como sociólogos, antropólogos, psicólogos e incluso filósofos e historiadores, se podría decir que existen 4 factores que hacen que la familia de hoy sea muy diferente.
Ø Uno de estos factores tiene que ver con la dilación en el desarrollo de la conformación de la estructura familiar por parte de las nuevas parejas. Esto es que, se retrasa aun más que antes el proceso del matrimonio e incluso vivir en pareja. No obstante, prolifera la cohabitación sin casamiento previo (matrimonio) aunado al descenso de la natalidad –la tenencia del número de hijos- ; aparte, irónicamente, crece el nacimiento de hijos fuera del matrimonio.
Ø Un segundo factor es el trastrocamiento en los modos de disolución de las familias, pues, a decir de las cifras arrojadas por diferentes estudios, el fenómeno de separación y/o ruptura familias en las sociedades más industrializadas aumentó significativamente; teniendo como dato curioso, no obstante, que los miembros de estas familias, seguidamente, construyan nuevas relaciones y por tanto nuevas familias.
Ø Tercer factor, la diversidad de formas familiares. En la actualidad se aceptan otros modos de constitución familiar: monoparentales, de hechos, unipersonales; pero la tendencia es que sigue prevaleciendo la familia nuclear: padre, madre e hijo (s).
Ø Cuarto factor, se prolonga la salida de los hijos del hogar familiar, no solo por razones económicas sino culturales.
Ø Quinto factor, la mujer trabajadora. Los hogares dejan de ser matriarcales y el cuidado y educación de los niños no depende sólo de la madre.